La tensión se apoderó de la manifestación de agricultores en el Casco, en una jornada marcada por la protesta y el descontento. Los participantes, visiblemente consternados por la situación, expresaron su malestar ante las autoridades pertinentes. La convocatoria contó con una masiva asistencia, evidenciando la unidad y la determinación de los agricultores en busca de soluciones a sus problemáticas. La confrontación de ideologías y la presión social se hicieron patentes en un escenario marcado por la incertidumbre y la urgencia por encontrar respuestas satisfactorias. La situación se mantiene en vilo, a la espera de desarrollos que puedan poner fin a la tensión reinante.
Tensión entre agricultores y líder sindical en protesta por el Casco
En el aparcamiento de Santa Teresa, la tensión ya se mascaba. Algunos exaltados recriminaban al líder de Unión de Uniones, Anastasio Yébenes, por no poder subir con sus tractores hasta la consejería de Agricultura y por dar explicaciones de sus reivindicaciones a la prensa. Tras una mañana sin incidentes, la tensión se trasladó a las puertas de la consejería, protegida por la Policía Nacional, donde se lanzaron algunas botellas. La marcha continuó hasta la sede del Gobierno en el palacio de Fuensalida, donde se repitieron las tiranteces.
Protesta de agricultores colapsa tráfico en Toledo en marcha hacia Fuensalida
La tractorada comenzó a las nueve de la mañana en la sede de la consejería de Desarrollo Sostenible, en el Polígono, para trasladarse a Santa Teresa. La presencia de tractores provocó cortes de tráfico en el Polígono, Santa Bárbara y zonas como Mas del Ribero, generando atascos, especialmente en la rotonda de Azarquiel. Los vecinos del Casco también se vieron afectados por los embotellamientos y desvíos de sus vehículos debido a la manifestación.
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