Castilla-La Mancha se alza contra el problema del desperdicio alimentario

Castilla-La Mancha se alza contra el problema del desperdicio alimentario

En un esfuerzo por reducir significativamente el impacto ambiental y social del desperdicio alimentario, la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha ha lanzado una serie de iniciativas para combatir esta problemática. Según datos recientes, España es uno de los países de la Unión Europea con mayor índice de desperdicio alimentario, lo que supone un grave problema económico y medioambiental. La región de Castilla-La Mancha se compromete a implementar estrategias sostenibles para reducir la cantidad de alimentos que se desechan en la cadena de producción y consumo, y así promover una cultura de consumo responsable.

Castilla-La Mancha se une a la lucha contra el desperdicio alimentario: reducir la pérdida para combatir el hambre y el cambio climático

En el marco del Día Internacional de Concienciación sobre el Desperdicio Alimentario, Castilla-La Mancha se suma a la conmemoración de esta fecha, que se celebra por quinta vez consecutiva. La Resolución aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2019 estableció el 29 de septiembre como día para concienciar sobre la pérdida y el desperdicio de alimentos.

La grave crisis del desperdicio alimentario

Según el informe de 2023 El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), 783 millones de personas padecieron hambre en 2022, y más de 3.100 millones de personas no podían permitirse una dieta saludable en 2021. La pérdida y el desperdicio de alimentos agravan este problema, reduciendo la cantidad de alimentos disponibles para el consumo y contribuyendo así a la inseguridad alimentaria.

Además, la pérdida y el desperdicio de alimentos se traduce en pérdidas económicas sustanciales, afectando tanto a productores como a personas consumidoras. Los desechos de alimentos en los vertederos representan entre un 8 y un 10 por ciento de los gases de efecto invernadero, convirtiéndose en un importante foco en la producción de metano.

La magnitud del problema

A nivel global, aproximadamente el 13 por ciento de los alimentos producidos se pierden entre la cosecha y la venta minorista. A ello, se suma el hecho de que en torno al 19 por ciento de la producción total de alimentos se desperdicia en los hogares, la restauración y el comercio al por menor.

Es alarmante que cada día los hogares desperdicien más de 1.000 millones de comidas, lo que equivale a 1,3 comidas diarias para cada persona hambrienta en el mundo. Esta situación es crítica y requiere la intervención urgente de todos los sectores para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos.

Castilla-La Mancha se compromete a luchar contra el desperdicio alimentario, consciente de la importancia de reducir la pérdida de alimentos para combatir el hambre y el cambio climático. Solo juntos podemos lograr un cambio significativo en esta crisis global.