La Comisión de Regulación de Energía autoriza la instalación de 391 megavatios de energía renovable en el segundo trimestre del año
En un importante paso hacia la transición energética, la Comisión de Regulación de Energía (CRE) ha otorgado su autorización para la instalación de 391 megavatios de energía renovable en el segundo trimestre del año. Esta decisión supone un avance significativo en la promoción de fuentes de energía limpias y sostenibles, contribuyendo así a la reducción de la dependencia del país en los combustibles fósiles y a la mitigación del cambio climático. La CRE ha demostrado su compromiso con el desarrollo de una matriz energética más diversificada y respetuosa con el medio ambiente, lo que se traducirá en beneficios para la sociedad y la economía en su conjunto.
MW de energía renovable autorizados en el segundo trimestre
Un total de 46 proyectos de energías renovables con una potencia agregada de 3.526,5 MW han conseguido autorizaciones administrativas a lo largo del segundo trimestre del año, según un informe del Observatorio de Energías Renovables de Foro Sella, elaborado por Opina 360 con datos del Boletín Oficial del Estado (BOE).
Destaca la región de Castilla-La Mancha, que lidera la instalación de energía renovable con 391,3 MW autorizados, seguida de Castilla y León con 1.336,3 MW y Andalucía con 864,8 MW.
Además, 42 proyectos de energías renovables han entrado en fase de información pública durante el segundo trimestre de 2024, con una potencia total de generación de 4.864,5 MW. Es destacable que tres cuartas partes de estos proyectos corresponden a parques fotovoltaicos, con Castilla-La Mancha liderando esta categoría con 832,3 MW en plantas fotovoltaicas.
Estos datos reflejan un megaimpulso a las energías renovables en España, lo que supone un paso importante hacia un futuro más sostenible y una mayor transición energética. La creciente demanda de energía renovable es un cambio positivo para el medio ambiente y la economía del país.
La instalación de energía renovable en España está en constante crecimiento, lo que se traduce en una mayor oferta de energía limpia y una reducción de la dependencia de los combustibles fósiles. Este crecimiento se debe en parte a la política energética del gobierno, que busca fomentar la transición energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
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