Toledo lanzará dos nuevas rutas de autobús y realizará cambios en ocho líneas existentes
La ciudad de Toledo se prepara para recibir un importante cambio en su sistema de transporte público. A partir de ahora, los usuarios del servicio de autobús urbano podrán disfrutar de dos nuevas rutas que conectarán diferentes puntos de la ciudad. Además, se llevarán a cabo modificaciones en ocho líneas existentes, con el fin de mejorar la eficiencia y la frecuencia de los servicios. Estas novedades tienen como objetivo mejorar la movilidad de los ciudadanos y visitantes, facilitando su desplazamiento por la ciudad. En los próximos días, se proporcionará más información sobre las nuevas rutas y los cambios específicos en cada una de las líneas afectadas.
Toledo modifica ocho líneas y lanza dos nuevas para mejorar el transporte público
La Concejalía de Movilidad de Toledo ha anunciado una reforma ilusionante y expectante en el transporte público de la ciudad, que incluye la modificación de ocho líneas y la creación de dos nuevas rutas. El objetivo es mejorar el servicio y adaptarlo a las necesidades de la ciudad y de los ciudadanos.
Según el concejal del área, Ignacio Jiménez, los cambios se traducen en la modificación de las líneas 1, 2, 62, 81, 82, 83, 92 y 93, y la creación de las líneas 32 y 94. La primera conexión Valparaíso y La Legua con el Hospital Universitario, mientras que la segunda oferta un itinerario circular entre el Polígono residencial y el industrial.
Mejoras y ajustes
Los cambios en el servicio de transporte público se han diseñado para mejorar la frecuencia y la cobertura en diferentes zonas de la ciudad. En las líneas 1 y 2, muy utilizadas a diario, se han eliminado algunas paradas y se han incorporado nuevas rutas para mejorar el tráfico. En la línea 62, se ha agregado un autobús más para mejorar las frecuencias.
Las líneas 81, 82 y 83 se unificarán en una nueva línea 83 para mejorar el servicio y satisfacer las demandas de los vecinos. La línea 92 ajustará su recorrido con nuevas paradas en los Alcázares y mejorará la conexión entre el hospital y la zona alta del barrio de Santa Bárbara. La frecuencia en la línea 93 se establecerá cada 25-30 minutos los domingos y festivos.
Una reforma experimental
Esta reforma en el transporte público se considera experimental, según Jiménez, para estudiar su acogida y su encaje en el futuro contrato de este servicio, que caduca en 2026. La Concejalía de Movilidad continuará trabajando con Unauto para seguir planteando ajustes y modificaciones en otras líneas del transporte público.
Los cambios entrarán en marcha el 4 de noviembre, excepto las dos nuevas líneas que comenzarán a operar una vez que lleguen los autobuses que el Ayuntamiento espera, aunque se retrasarán un mes debido a un conflicto en Oriente Medio.
El concejal Ignacio Jiménez aseguró que los cambios no incrementarán significativamente los costos, ya que se ha tratado de mantener el contrato actual y aplicar modificaciones que compensan los nuevos costos con la reducción de kilómetros en las líneas objeto de retoque.
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