Un policía se convierte en el protector de una mascota llamada Pepe
En un inusual caso de amistad y solidaridad, un policía se ha convertido en el protector de una mascota llamada Pepe, que ha sido víctima de maltrato y abandono. La historia de este héroe uniformado comenzó cuando recibió una llamada de emergencia para auxiliar a un animal en situación de peligro. Al llegar al lugar, encontró a Pepe, un animal indefenso y lastimado, que había sido abandonado en la calle. Desde ese momento, el policía decidió tomar bajo su protección a Pepe, brindándole atención y cuidado, y convirtiéndose en su guardián y amigo más fiel.
El héroe de Antequeruela: policía rescata a anciano que estuvo seis horas sin ayuda
En un acto de heroísmo y solidaridad, un policía de la Policía Nacional se convirtió en el ángel guardián de un anciano de 86 años que se quedó solo en el suelo de su habitación durante más de seis horas.
La caída de Pepe García, un vecino del barrio de Antequeruela, ocurrió el pasado día 17 de septiembre sobre las 04:30 horas de la madrugada, justo al lado de su cama. Debido a su estado de salud y el olvido de la medalla de teleasistencia, Pepe no pudo pedir ayuda y se quedó inmovilizado en el suelo.
La mala suerte o una cadena de infortunios hizo que el vecino de Antequeruela estuviera tirado en el suelo hasta las 11:10 horas del 17 de septiembre. La primera razón para que estuviera casi siete horas pidiendo auxilio desde el piso de su habitación es que lleva tres años viviendo solo en el callejón del Cura de Toledo, aunque cuenta con ayuda domiciliaria varios días a la semana y la colaboración de los vecinos que están pendientes hasta de la hora que se va a dormir.
El otro motivo fue que esa noche se dejó el aparato de teleasistencia en la mesa del comedor, sin poder avisar a nadie. Sin embargo, la situación cambió cuando la Policía Nacional recibió el aviso del 112 sobre el estado de Pepe.
El rescate del agente Castaño
En ese momento, dos dotaciones de Policía Nacional y una ambulancia se personaron en el domicilio. Tras investigar la manera de acceder a la casa, el agente Ricardo Castaño observó que una ventana, ubicada en el patio de luces, con acceso a la cocina estaba abierta, pero tenía la persiana cerrada casi al completo.
Un vecino del edificio dejó una escalera para que Castaño accediera al piso de Pepe por la ventana de la cocina y fuera el primero en llegar a socorrerlo. El agente de la Policía Nacional se encontró «muy nervioso» a Pepe García, al que tranquilizó y ayudó.
Ayer, se reencontraron con gusto. Pepe García y el agente Ricardo Castaño se reunieron nuevamente, esta vez en un encuentro más alegre, donde Pepe agradeció la ayuda del agente que se convirtió en su ángel guardián.
Foto: Yolanda Lancha
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