El gobierno destina 28 millones de euros a programas de formación y prácticas para personas paradas en el mercado laboral

El gobierno destina 28 millones de euros a programas de formación y prácticas para personas paradas en el mercado laboral

En un esfuerzo por impulsar la empleabilidad y reducir el desempleo, el gobierno ha anunciado una inversión de 28 millones de euros en programas de formación y prácticas dirigidos a personas que se encuentran paradas en el mercado laboral. Esta iniciativa tiene como objetivo principal mejorar las competencias y habilidades de los desempleados, aumentando así sus posibilidades de ingresar en el mercado laboral y contribuir al crecimiento económico del país. Esta medida se enmarca dentro de las políticas de desarrollo económico y social del gobierno, que busca fomentar la inclusión laboral y reducir las desigualdades en el mercado laboral.

Gobierno destina 28 millones de euros a formación y prácticas para empleados desempleados

La Junta de Gobierno ha autorizado una partida de 28 millones de euros para programas de formación profesional dual, con el objetivo de cualificar a personas desempleadas en oficios tradicionales y artesanos, como electricistas, albañiles, fontaneros, entre otros.

La formación para oficios en demanda, según la consejera portavoz Esther Padilla, es básica para el desarrollo del día a día y va escaseando. Por eso, se han establecido varios programas para abordar esta necesidad.

Programas de formación para oficios tradicionales y artesanos

Uno de los programas se centra en oficios artesanos o tradicionales, como electricistas, albañilería o fontanería, por ejemplo, y también abarca el sector agrario o forestal. Para esta línea, se ha destinado un presupuesto de 3,5 millones de euros.

Otra de las líneas, denominada Dual Verde, se dirige a zonas con riesgo de despoblación o de categoría agrícola intermedia, con un presupuesto de tres millones de euros.

Otras líneas de formación para colectivos específicos

Además, se han establecido líneas de formación específicas para colectivos más vulnerables, como personas con discapacidad, víctimas de violencia de género o de terrorismo, jóvenes que han pasado por sistemas de protección de menores, personas que perciben rentas mínimas de inserción, internos de centros penitenciarios o personas que han tenido problemas de drogodependencia o adicciones. Para estas acciones, se ha destinado un presupuesto de 4,2 millones de euros.

La línea Nuevas Oportunidades se enfoca en desempleados de más de 50 años, con el objetivo de facilitar su inserción en el mercado laboral en una etapa en la que se empieza a complicar. Se ha destinado un presupuesto de 7,8 millones de euros para esta línea.

Por último, las Escuelas Profesionales se dirigen a jóvenes, con un presupuesto de 8,7 millones de euros. Esta línea contempla además una beca para los participantes.

Requisitos y objetivos

En todas estas líneas, las entidades están obligadas a insertar un mínimo de participantes, que van del 10 al 25 por ciento en función de cada programa. La consejera portavoz valoró que son acciones muy individualizadas, pues los participantes van de ocho a diez en cada proyecto.

El tiempo de trabajo no puede superar el 65 por ciento de la jornada máxima por convenio y el centro de trabajo no puede estar a más de 50 kilómetros del lugar de residencia. El objetivo es lograr una inserción laboral del 60 por ciento, es decir, que seis de cada diez participantes acaben encontrando empleo después de pasar por esta formación.