La renovación de la cornisa del Águila de Toledo

La renovación de la cornisa del Águila de Toledo

En un esfuerzo por preservar la riqueza cultural y patrimonial de España, se ha llevado a cabo la ambiciosa renovación de la cornisa del Águila de Toledo, uno de los monumentos más emblemáticos y visitados de la ciudad. Esta intervención, que ha contado con la colaboración de expertos en restauración y conservación, ha permitido devolver el esplendor original a este elemento arquitectónico fundamental, que data del siglo XVI. La renovación de la cornisa es solo una parte del proyecto de restauración integral del Águila de Toledo, que busca proteger y valorizar este tesoro cultural para las futuras generaciones.

La renovación de la cornisa del Águila de Toledo: un homenaje a Bahamontes

El destino ha querido que el día en el que Federico Martín Bahamontes cumpliría 96 años, el Ayuntamiento de Toledo le dedique un nuevo homenaje. Quién iba a decir que este acto de reconocimiento iba a deberse en parte a los actos vandálicos que ha venido recibiendo la escultura creada en su honor.

El caso es que sea como fuere, hoy se reubicará en la cuesta de las Armas, junto al paseo del Miradero, la talla de bronce que ilustra al Águila de Toledo, al deportista más prestigioso de la ciudad imperial. Lo hará con una nueva peana sobre la que se apoyará la escultura, con el fin de evitar o, al menos, dificultar nuevos actos vandálicos como los que ya ha recibido esta representación de bronce.

Lo hará en el día de su cumpleaños y a justo un mes del primer aniversario de su fallecimiento. Además, el acto contará con un ingrediente extra, ya que la ONCE presentará hoy también el cupón del próximo sábado día 13 de julio que se dedicará exclusivamente a Federico Martín Bahamontes, el primer ciclista español en ganar el Tour de Francia.

Vandalismo: un problema recurrente

Habrá que ver si esta nueva peana consigue frenar el vandalismo que ha recibido la escultura creada por Javier Molina Gil, afectada por estos episodios en varias ocasiones. El último de los sucesos y el que llevó al equipo de Gobierno a construir lo que hoy se presenta tuvo lugar en diciembre del pasado año, cuando las cámaras de vigilancia de la zona captaron a los vándalos usando una radial para dejar la escultura de bruces contra el suelo.

Previamente, desde su instalación, otros atentados contra la misma acabaron dañando su estabilidad, lo que obligó al escultor a reforzarla para que no se cayera por su propio peso. Hoy, el Águila tendrá nueva cornisa sobre la que apoyarse.

Esperamos que esta renovación sea un homenaje digno para un deportista tan legendario como Federico Martín Bahamontes, y que la ciudad de Toledo pueda disfrutar de esta escultura sin que sufran nuevos daños.