En una revelación sorprendente, se ha descubierto que el Ayuntamiento de nuestra ciudad conserva una falsificación de una obra atribuida a Cervantes. Esta noticia ha generado un revuelo en el ámbito cultural, ya que se creía que dicha pieza pertenecía al ilustre autor español. La falsificación, meticulosamente elaborada, ha engañado a expertos durante años, evidenciando la complejidad y sofisticación de la misma. Este hallazgo plantea interrogantes sobre la autenticidad de otras obras que se encuentran en posesión de instituciones públicas, y pone de manifiesto la importancia de la investigación y verificación en el mundo de la cultura y el patrimonio. El Ayuntamiento ha anunciado que se llevará a cabo una exhaustiva investigación para esclarecer los detalles de esta intrigante historia.
Descubren falsificación de Cervantes en el Archivo Histórico de Toledo
El Archivo Histórico de la Provincial de Toledo (Ahpto) ha revelado una intrigante historia relacionada con la dote y arras de Miguel de Cervantes a Catalina de Palacios Salazar. En este espacio toledano se conserva el original de la carta, firmada por ambos esposos, junto con una falsificación realizada por un notario en el siglo XIX. Esta situación generó una polémica que incluso llegó a ser discutida en una sesión plenaria del Senado.
Polémica por copia del documento de dote y arras de Cervantes en Toledo
En 1908, el entonces notario de Esquivias, Mariano Tubilla, creó una copia casi perfecta del documento original, incluyendo las firmas de los cónyuges y utilizando papel sobrante del protocolo original. Esta copia, de una verosimilitud asombrosa, llegó a generar rumores de que el documento original había sido robado y estaba a punto de ser vendido en París. Sin embargo, el senador Luis Palomo Ruiz investigó el caso y confirmó que el original se encontraba en poder del notario archivero del distrito de Illescas, mientras que la copia seguía en posesión de las hijas de Tubilla.
El Archivo Histórico Provincial de Toledo resguarda tanto el original como la copia, que son prácticamente indistinguibles en la actualidad. Se plantea la incógnita de los motivos que llevaron al notario del siglo XIX a reproducir tan fielmente el documento, en lugar de realizar una copia autenticada convencional.
Además, en el mismo protocolo se halla otra firma de Cervantes en una carta de poder a favor de su suegra, planteando la incertidumbre entre si se trató de un homenaje al escritor o una falsificación interesada.
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