La operación policial llevada a cabo en la provincia ha supuesto un importante golpe al tráfico de drogas en la región. Durante la intervención, las autoridades lograron incautar una gran cantidad de sustancias estupefacientes, así como desarticular una red criminal dedicada a este ilícito negocio.
Este exitoso operativo representa un duro golpe a las organizaciones delictivas que operan en la zona, demostrando el compromiso de las fuerzas de seguridad en la lucha contra el crimen organizado. La cooperación ciudadana ha sido fundamental para el éxito de esta misión, resaltando la importancia de la colaboración entre la sociedad y las autoridades para combatir eficazmente este flagelo.
Desarticulada banda de narcotráfico en Madrid y Toledo con kilos de hachís, Detenidos miembros de red de drogas en operación NidoVendetta
La Guardia Civil y la Policía Nacional han llevado a cabo la detención de catorce presuntos integrantes de una organización criminal dedicada a la distribución y venta de sustancias estupefacientes en las localidades de Madrid y Toledo. Durante el operativo, se logró incautar un total de 377 kilos de hachís y 93 kilos de marihuana. La investigación, denominada operación Nido-Vendetta, se inició a finales del año pasado tras obtener información sobre las actividades ilícitas de este grupo delictivo.
Los detenidos, de edades comprendidas entre los 25 y 70 años, de nacionalidad española y magrebí, enfrentan acusaciones por pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y blanqueo de capitales. Cuatro de los implicados han sido enviados a prisión provisional por decisión del Juzgado de Instrucción número 2 de Alcobendas, encargado de la investigación.
La banda operaba bajo el mando de tres individuos desde tres pisos de un mismo edificio en San Sebastián de los Reyes, Madrid. Para evitar ser descubiertos, contaban con la colaboración del conserje del edificio, quien monitoreaba las actividades de los sospechosos mediante cámaras de seguridad. Para ocultar sus actividades delictivas, los vehículos y propiedades utilizados por la organización estaban registrados a nombre de testaferros en Tres Cantos, Madrid.
Durante el desarrollo de la operación, se logró identificar dos viviendas en Escalona donde se cultivaba marihuana, así como una guardería en Fuencarral-El Pardo donde se almacenaban estupefacientes. Además, se detuvo a cinco individuos encargados de la logística y custodia de estos lugares.
En los siete registros autorizados por el juzgado, se encontraron grandes cantidades de droga, armas de aire comprimido, machetes, vehículos de lujo valuados en más de 300.000 euros, relojes de alta gama y 58.000 euros en efectivo. El valor de los estupefacientes incautados se estima en más de tres millones de euros en el mercado negro.
Las autoridades también descubrieron indicios de blanqueo de capitales por parte del líder de la organización, quien no contaba con actividad laboral conocida. Las investigaciones continúan abiertas tanto en este aspecto como en relación al tráfico de drogas, tras descubrir la existencia de un punto de venta en el distrito de Chamberí vinculado a la red desmantelada.
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