La Corrida de la Prensa deja poco para narrar
En el marco del XXVIII Festival de Deporte y Comunicación, se llevó a cabo la tradicional Corrida de la Prensa, un evento que reúne a periodistas y deportistas en una competición de velocidad y resistencia. Sin embargo, la expectación y el entusiasmo que caracterizan a este tipo de eventos parecieron faltar en esta edición. La falta de sorpresas y la predicable victoria del campeón defensor, Juan Pérez, dejaron a los espectadores con un sabor a déjà vu, sin mucho que contar ni destacar. ¿Qué pasó con el espíritu competitivo y la emoción que caracterizan a este tipo de eventos?
La Plaza de Toros de Las Ventas celebra un tarde de emociones
La expectativa era alta en la Plaza de Toros de Las Ventas, donde se congregó una gran cantidad de público ansioso por disfrutar de una emocionante tarde de toros. Y no defraudó. A un minuto de las 19:00 horas, la plaza resonó con una unánime ovación cuando Felipe VI, acompañado de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el ministro de Agricultura, Luis Planas, la presidenta de la Asociación de la Prensa, María Rey, y Francisco Rivera Ordónez, asomó por la ventana del palco.
Acto seguido, sonaron los acordes del himno de España, y el ambiente se volvió aún más solemne y emocionante. Sin embargo, la tarde no estuvo exenta de emociones y sorpresas. El diestro Victorino no dio la talla, y la terna tampoco enmendó la plana.
Borja Jiménez brilla con su conocimiento de los grises de Victorino
El torero de Espartinas, Borja Jiménez, se llevó los aplausos del público con su excelente faena, demostrando un gran conocimiento de los grises de Victorino. Su reencuentro con los de la A coronada en Madrid fue emocionante, con una serie de embestidas que emocionaron al público y merecieron un silencio respetuoso. Aunque su uso de la espada y del verduguillo no fue del todo satisfactorio, su labor fue reconocida con palmas y ovación en el arrastre para Garañuelo.
El cuarto toro, sin embargo, quedó muy mermado tras su paso por el caballo. Llegó mortecino a la muleta de Borja Jiménez, y el espada no pudo más que pasarlo por ambos pitones y quedó inédito.
Un cariñoso brindis de admiración a Raúl González Blanco
fútbol.
Por otro lado, las filias y fobias que despertó el tercio de varas al sexto por parte de Espartaco solo fueron comparables con la horrible lidia de Vicente Varela y lo discreto de Javier Pascual con los palos. Juan Sierra se salvó con más voluntad que acierto, antes de un trasteo de muleta que naufragó entre tiempos para colocarse, idas y venidas, y recortes a embestidas reponedoras.
Quiso justificarse entre las protestas y la espada tampoco enmendó lo ocurrido. Aun así, el público se llevó una gran impresión de la tarde, y la ovación en el palco y las palmas cariñosas a Álvaro de la calle, que actuó como sobresaliente, a pesar de no haberle dejado dar un pase.
Fue una tarde emocionante en la Plaza de Toros de Las Ventas, llena de altibajos y sorpresas. Pero al final, el público se llevó una gran impresión de la corrida de toros.
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